domingo, 15 de abril de 2012

LA IGLESIA COMUNIDAD DE DISCÍPULOS: Notas y Características

Bien ahora que hemos recordado el tema anterior, vamos a descubrir 
como,  por sus características podemos reconocer a la Iglesia de Cristo.



Utilizaremos la biblia on line para buscar las lecturas bíblicas:
Ef. 4,3-6;  1Pe. 1,14-16;  Mt.18,19-20;  Ef. 2,20-21 


Ahora vamos a escuchar con atención la explicación del ex pastor evangélico pentecostal Fernando Casanova   sobre Las características de la Iglesia presta mucha atención y has tus anotaciones para que hagas UN COMENTARIO EXPLICANDO LAS NOTAS: UNA , SANTA, CATÓLICA Y APOSTÓLICA.



Cristo funda su Iglesia como institución de salvación eterna de los hombres, por ello debía dotarla de unas cualidades propias, que fuesen notas o señales características por la que puedan conocer, cual es la verdadera Iglesia fundada por Él y donde esta de verdad el camino de la salvación. En el “Credo Apostólico” confesamos nuestra fe en la Iglesia que es: Una, Santa, Católica y Apostólica.

UNA: La Iglesia es una porque tiene como origen y modelo la unidad de un solo Dios en la Trinidad de las Personas; como fundador y cabeza a Jesucristo, que restablece la unidad de todos los pueblos en un solo cuerpo; como alma al Espíritu Santo que une a todos los fieles en la comunión en Cristo. La Iglesia tiene una sola fe, una sola vida sacramental, una única sucesión apostólica, una común esperanza y la misma caridad.


La única Iglesia de Cristo, como sociedad constituida y organizada en el mundo, subsiste (subsistit in) en la Iglesia católica, gobernada por el sucesor de Pedro y por los obispos en comunión con él. Sólo por medio de ella se puede obtener la plenitud de los medios de salvación, puesto que el Señor ha confiado todos los bienes de la Nueva Alianza únicamente al colegio apostólico, cuya cabeza es Pedro.

SANTA: La Iglesia es santa porque Dios santísimo es su autor; Cristo se ha entregado a sí mismo por ella, para santificarla y hacerla santificante; el Espíritu Santo la vivifica con la caridad. En la Iglesia se encuentra la plenitud de los medios de salvación. La santidad es la vocación de cada uno de sus miembros y el fin de toda su actividad. Cuenta en su seno con la Virgen María e innumerables santos, como modelos e intercesores. La santidad de la Iglesia es la fuente de la santificación de sus hijos, los cuales, aquí en la tierra, se reconocen todos pecadores, siempre necesitados de conversión y de purificación.




CATOLICA: La Iglesia es católica, es decir universal, en cuanto en ella Cristo está presente: «Allí donde está Cristo Jesús, está la Iglesia Católica». La Iglesia anuncia la totalidad y la integridad de la fe; lleva en sí y administra la plenitud de los medios de salvación; es enviada en misión a todos los pueblos, pertenecientes a cualquier tiempo o cultura.
La Iglesia debe anunciar el Evangelio a todo el mundo porque Cristo ha ordenado: «Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes, bautizándolas en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo» (Mt 28, 19). Este mandato misionero del Señor tiene su fuente en el amor eterno de Dios, que ha enviado a su Hijo y a su Espíritu porque «quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad» (1 Tm 2, 4)

APOSTÓLICA: La Iglesia es apostólica por su origen, ya que fue construida «sobre el fundamento de los Apóstoles» (Ef 2, 20); por su enseñanza, que es la misma de los Apóstoles; por su estructura, en cuanto es instruida, santificada y gobernada, hasta la vuelta de Cristo, por los Apóstoles, gracias a sus sucesores, los obispos, en comunión con el sucesor de Pedro.


La sucesión apostólica es la transmisión, mediante el sacramento del Orden, de la misión y la potestad de los Apóstoles a sus sucesores, los obispos. Gracias a esta transmisión, la Iglesia se mantiene en comunión de fe y de vida con su origen, mientras a lo largo de los siglos ordena todo su apostolado a la difusión del Reino de Cristo sobre la tierra.